A Ryn solo le importan dos cosas: su familia y el cementerio de su familia. Y ahora mismo, ambos se encuentran en apuros. Desde la muerte de sus padres, Ryn y sus hermanos llevan una vida precaria como sepultureros en la remota aldea de Colbren, que se encuentra al pie de una cadena montañosa dura y mortal que alguna vez fue el hogar de los fae. Sin embargo, el problema de ser un sepulturero en Colbren es que los muertos no siempre permanecen muertos.
Los cadáveres resucitados se conocen como «entes de huesos». Según la leyenda, son el resultado de una maldición que existe desde hace varias décadas. Cuando Ellis, un aprendiz de cartógrafo con un pasado misterioso, llega a la ciudad, los entes de huesos atacan con renovada ferocidad. ¿Acaso hay algo que los atrae? Y, sobre todo, ¿es posible detenerlos?
Juntos, Ellis y Ryn se embarcarán en un viaje que los llevará al corazón de las montañas, donde tendrán que enfrentarse tanto a la maldición como a verdades sobre ellos mismos que están muy bien enterradas.
«Ryn era una criatura medio salvaje y le encantaba un cementerio, la sensación del aire fresco de la noche y el peso de una pala. Ella sabía cómo morían las cosas. Y en sus momentos más lúgubres, temía no saber cómo vivir».
«Un cuento de hadas oscuro, que nos recuerda a los hermanos Grimm, las Brontë y a Neil Gaiman al mismo tiempo. Entes de huesos es una novela cautivadora e hipnótica. Emily Lloyd-Jones es una autora que todos deberían seguir de cerca».
―Mackenzi Lee, autora de La guía del caballero para el vicio y la virtud